25 Sep
De cómo llegó Chúo a la MUD
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Cuentan que hace mes y medio cuando se generó la posibilidad de que el periodista Jesús Chúo Torrealba fuese designado secretario ejecutivo de la MUD –idea que surgió de Un Nuevo Tiempo- varias de las organizaciones partidistas ofrecieron resistencia. Sentían -según trascendió- que iba a ser muy difícil para Chúo calzar los zapatos de Ramón Guillermo Aveledo quien a pesar de que los partidos tradicionales lo consideran uno de ellos, tuvo que cumplir una labor diplomática y en muchos sentidos titánica, para mantener la unidad. En cambio a Chúo lo han percibido más lejano,  –a pesar de su intensa actividad en tiempos de la Coordinadora Democrática-. La fuerza de Chúo se sustenta en su importante labor en los medios de comunicación y su gran tesón para mantener al aire sus programas “Radar de los barrios” y “Del dicho al hecho”, lo cual ha manejado con autonomía, circunstancia que pudiese ser una piedrita en el zapato para muchos, y la razón de fondo que propició la resistencia a su designación. Es decir, tal vez para la MUD tradicional Chúo tiene demasiada entidad propia, y como él sabe las dificultades a vencer porque conoció el monstruo por dentro -y porque su prestigio profesional está en juego y tiene mucho qué perder- se adelantó a rechazar la designación.

 

Pero las circunstancias fueron cambiando y Chúo venció los obstáculos. Primero fue el incidente con Carlos Raúl Hernández. Como recordarán, Ramón José Medina, directivo MUD hasta hace muy poco, anunció por twitter que Carlos Raúl había sido nombrado como sustituto de Aveledo.  Y ciertamente, Primero Justicia y Acción Democrática habían avanzado en esa candidatura hasta el punto de tratar de aislar la opinión de Voluntad Popular, y propiciar una posible ruptura de la MUD. La designación de Carlos Raúl Hernández era vista como una afrenta para los defensores de “la salida” puesto que su posición pública ha sido descalificarla en términos muy duros. El tuit de Ramón José fue como una bomba que agitó las aguas –tanto que algunos mal pensados dicen que fue elaborado- y la designación de Carlos Raúl se abortó.

 

Revivió entonces la propuesta con Chúo junto a sus atributos de ser conciliador -todo lo contrario a Carlos Raúl- y de ser un buen comunicador, que además se ha preocupado por acercarse a los sectores populares sin negar la calle. Todos los partidos fueron aceptando, menos Voluntad Popular. Volvió a plantearse la posibilidad de dejar sola a esta organización política y nombrar a Chúo por mayoría. Y aquí sucedió algo interesante que creo da una primera señal favorable sobre las habilidades políticas de Chúo Torrealba: consideró imprescindible la unanimidad para su designación. Fue así que se reunió con los jefes de Voluntad Popular y los convenció.

 

Creo que algunos jefes de partidos tradicionales se van a caer de una mata si piensan que Chúo no va a hacer política. Han llegado a decir que el nuevo secretario general sería una especie de vocero, más nada. Sospecho que eso va a ser muy distinto. A Chúo le han dado un poder y lo va a ejercer. Porque él también es mucho lo que está arriesgando. Y porque está convencido de que la oposición además de unida tiene que sacudirse la inercia.

 

Por lo pronto en su primera rueda de prensa anunció calle, lo cual es un giro evidente a la MUD que lo precedió. Que así sea.